Para atender las necesidades y nuevas exigencias del público actual, la Cineteca Nacional fue remodelada. Así, con un presupuesto de 540 millones de pesos, el espacio crece de seis a 10 pantallas, se agrega un museo cinematográfico, un foro al aire libre y áreas verdes para el disfrute de sus visitantes.

En entrevista para IDM, Paula Astorga, directora General de la Cineteca Nacional dijo que la remodelación es importante porque mantiene un alto valor para la sociedad, funciona como un soporte para la industria cinematográfica mexicana así como para pequeños distribuidores que manejan cine de arte.

Por otro lado, agregó la Directora General, el nuevo museo del cine atiende una carencia, no sólo del sector y del público consumidor; sino de la propia historia y del análisis que conforma la cinematografía mexicana.

Antecedentes

Paula Astorga, resaltó que la remodelación de la Cineteca Nacional era necesaria por varias razones. “Primero, es un edificio construido en los años setentas, y en 1984 el espacio se adecuó para recibir a la Cineteca después de un incendio en 1982”.

Desde entonces la Cineteca, narró la entrevistada, a lo largo de distintas administraciones tuvo una serie de remodelaciones, pero realmente no tuvo un ejercicio de mantenimiento general.

La obra originaria del Arq. Manuel Rocha, era un foro perteneciente a la sociedad de autores y compositores mexicanos; de ahí se adecuó el espacio para la Cineteca, abundó Astorga.

Sin embargo, la institución ha crecido, no sólo en cuanto a personal y archivo fílmico de la nación, también por la cantidad de personas visitantes, ya que en sus inicios asistían 50 ó 100 mil personas y en 2011 fueron alrededor de 630 mil. Por tal razón, la construcción requirió un cambio.

Conjuntamente, explicó la Directora General, el edificio para resguardar los materiales fílmicos de la producción actual requería mayor espacio. El recinto contaba con cinco bóvedas, cuatro para resguardar 15 mil filmes clásicos del cine mundial en formatos de 35 y de 16 milímetros.

La quinta bóveda resguarda material iconográfico,  como carteles, fotografías, diapositivas, negativos y vídeos  Con la remodelación la superficie crece de mil 500 a más de dos mil 200 m2 con una nueva capacidad para almacenar hasta 50 mil películas.

Asimismo, expresó la Directora General de la Cineteca Nacional, necesitaban aumentar su estacionamiento, mejorar las instalaciones de los sanitarios, y establecer sitios más cómodos para la convivencia y esperar las películas.

Por iniciativa de la titular del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes, Consuelo Sáizar, se decidió una intervención integral con un principio fundamental: la recuperación de la Cineteca como un lugar de uso público y cultural de aproximación a filmes.

Por supuesto, destacó Astorga, se aprovechó para brindarle una actualización tecnológica a todo el equipamiento de producción y sonido, porque el anterior ya no iba al día con todas las nuevas tendencias del cine en los últimos años.

¿En qué consiste la remodelación?

Inaugurada el pasado 7 de noviembre, el proyecto de remodelación consistió en dos partes. La primera, a cargo del hijo del arquitecto original, Mauricio Rocha para intervenir los edificios actuales. Aquí, se remozó todo el exterior y la plaza central de las salas actuales.

La segunda parte, fue trabajada por el Arq. Michel Rojkind, encargado de rediseñar, actualizar y remozar el interior de las salas actuales, y además implementar el foro al aire libre con capacidad para 700 personas, así como un nuevo espacio fundamental para el público.

Asimismo, diseñaron el espacio del área de estacionamiento que prácticamente ocupaba el 60% del terreno del inmueble, que requería toda una nueva actualización.

A juzgar de Astorga, la primera decisión tomada fue de acuerdo a la propuesta de los arquitectos y necesidades: construir un estacionamiento definido en siete niveles, garantizando así un cupo de 215 automóviles más al espacio.

Crearlo en siete niveles resultó una gran ventaja porque brindó la oportunidad de retomar un espacio de siete mil m2 de jardines, y cuatro nuevas salas cinematográficas de 200 butacas cada una.

 

Por Michel Alejandra Olguín Lacunza

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